Pascua
Nombre | Pascua | |
---|---|---|
Fecha | Al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado | |
Origen | Emancipación de Egipto | |
Ceremonia en el Antiguo Testamento | Rociar la sangre del cordero y asar la carne en el fuego | |
Ceremonia en el Nuevo Testamento | Comer el pan y beber el vino que representan la carne y la sangre de Jesús después de la Ceremonia del Lavado de Pies. | |
Cumplimiento de la profecía | Ser liberados del mundo pecador | |
Bendición | Perdón de pecados, vida eterna, protección de los desastres, cumplimiento del primer mandamiento |
La Pascua es la primera de las siete fiestas de tres tiempos registrada en la Biblia. Se observa al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado, y corresponde al periodo entre marzo y abril en el calendario gregoriano (calendario solar). Las siete fiestas están clasificadas en tres tiempos: la Fiesta de los Panes sin Levadura, la Fiesta de las Semanas, y la Fiesta de los Tabernáculos. Y la Pascua pertenece al primer tiempo de las fiestas, la Fiesta de los Panes sin Levadura.
La Pascua es la verdad nuclear del nuevo pacto que Dios estableció para salvar a la humanidad. Al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado, Jesucristo estableció el nuevo pacto guardando la Pascua con sus discípulos con el pan y el vino que representan su carne y su sangre. Así como en los tiempos del Antiguo Testamento cuando los israelitas fueron liberados de Egipto guardando la Pascua, y entraron en la tierra de Canaán, en los tiempos del Nuevo Testamento el pueblo de Dios recibe la vida eterna y la libertad del mundo pecador guardando la Pascua del nuevo pacto, y entran en el reino de los cielos.
El origen y el significado de la Pascua
Origen y significado
La Pascua se originó en la historia de los israelitas, que habían sido esclavos en Egipto. Ellos fueron protegidos de las plagas y liberados al guardar la Pascua. El nombre “Pascua”, que significa “la fiesta que hace pasar los desastres por encima”, proviene de esta historia. En hebreo, la palabra Pascua es Pesach (פֶּסַח). Deriva del verbo pasach (פָּסַח), que significa “pasar” o “saltar”. En griego recibe el nombre Pascha (πασχα). En los dos idiomas que se utilizaron para escribir la Biblia, la palabra Pascua significa que “(los desastres) pasan por encima”.
Pascua en diferentes idiomas
La Pascua mencionada en el libro de Éxodo es la siguiente en cada idioma:
Idioma | Traducción |
---|---|
Hebreo | Pesach(פֶּסַח) |
Griego | Pascha(πασχα) |
Coreano | 유월절 (o 과월절 en algunas traducciones) |
Inglés | Passover |
Español | Pascua |
Neerlandés | het Joodse Paasfeest |
Noruego | påske |
Alemán | Pạssah fest |
Latín | Pascha |
Ruso | еврейская пасха |
Rumano | Pesah |
Mongol | Дээгүүр өнгөрөх баяр |
Suajili | Pasaka ya Kiyahudi |
Sueco | påskhögtid |
Ucraniano | Песах |
Italiano | pasqua ebraica |
Indonesio | Paskah |
Japonés | 過越祭(すぎこしさい) |
Chino (simplificado) | 逾越节 |
Checo | pesach |
Turco | Fısıh Bayramı, Hamursuz Bayramı |
Persa | فصح[fesh] |
Portugués | páscoa |
Polaco | Pascha (święto w judaizmie) |
Francés | Pâque |
Finés | pääsiäinen |
Húngaro | Páska |
La Pascua del Antiguo Testamento
Ceremonia
Al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado, los israelitas sacrificaban corderos de un año, y asaban su carne al fuego y la comían con panes sin levadura y hierbas amargas. No se podía dejar la carne hasta la mañana. Además, los huesos del cordero de la Pascua no debían ser quebrados.[1][2][3]
La historia de la Pascua del Antiguo Testamento
- Éxodo
La Pascua fue guardada por primera vez alrededor del siglo xv a. C., en el tiempo de Moisés. Dios infligió diez plagas sobre Egipto para liberar a los israelitas que habían sido esclavos en Egipto aproximadamente cuatrocientos años. Antes que la décima plaga cayera sobre la tierra, la plaga que mató a todos los primogénitos, Dios permitió que los israelitas guardaran la Pascua.
“[…] es la Pascua. de Jehová. Pues yo pasaré aquella noche por la tierra de Egipto, y heriré a todo primogénito en la tierra de Egipto, así de los hombres como de las bestias; y ejecutaré mis juicios en todos los dioses de Egipto. Yo Jehová. Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto. Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.”
Al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado, los israelitas sacrificaban corderos de un año sin defecto, ponían la sangre del cordero en los dos postes y en el dintel de las casas y asaban la carne al fuego y la comían con panes sin levadura y hierbas amargas.[4] En la noche de la Pascua, una plaga que mató a los primogénitos de todas las casas egipcias vino sobre la tierra. Hubo un clamor muy grande en Egipto porque todos los primogénitos fueron heridos de muerte, desde el primogénito de Faraón y el primogénito del cautivo que estaba en la cárcel, hasta el primogénito de los animales.[5] Sin embargo, ni un solo primogénito de las casas de los israelitas murió; fueron protegidos de la plaga al guardar la Pascua, como Dios les había prometido. Al día siguiente, los israelitas salieron de Egipto para establecerse en Canaán, la tierra prometida, con alegría por la libertad y la emancipación.
- En el desierto
Después de salir de Egipto, los israelitas completaron la construcción del tabernáculo el primer día del primer mes del año siguiente,[6] y celebraron la Pascua por segunda vez en el desierto de Sinaí, el día catorce de ese mes.[7] Dios dijo que quienes no pudieran guardar la Pascua, porque eran ceremonialmente impuros por causa de un muerto o porque estuvieran de viaje lejos, debían celebrarla al anochecer del día catorce del segundo mes conforme a todos los ritos. Dios advirtió que debían guardar la Pascua y que aquellos que no la guardaran serían cortados del pueblo.[8]
Sin embargo, en la Biblia no hay registro de los israelitas guardando la Pascua por treinta y ocho años mientras caminaban por el desierto, tras guardarla en el segundo año después del Éxodo. Al final de su viaje en el desierto, cuando cruzaron el río Jordán y llegaron frente a la ciudad de Jericó, Dios les ordenó realizar la circuncisión. La razón era que todos los hombres de veinte años o más que salieron de Egipto murieron en el desierto (excepto Josué y Caleb[9]), además, los que nacieron en el desierto no habían sido circuncidados.[10] Por tanto, ya que solo los circuncidados podían guardar la Pascua, el hecho de que no hubieran sido circuncidados significaba que no habían guardado la Pascua.[11] Después que se realizó la circuncisión, los israelitas guardaron la Pascua en los llanos de Jericó y entraron en la tierra de Canaán ese mismo año.[12]
- Periodo del rey Ezequías
La historia del poder de Dios manifestado a través de la Pascua se puede encontrar en la época de Ezequías, unos ochocientos años después de la época de Moisés. Ezequías fue el decimotercer rey del reino de Judá en el sur. En aquellos días, Israel había sido dividido en Judá, el reino del sur, e Israel, el reino del norte.
Cuando el rey Ezequías fue coronado, tomó la decisión de guardar la Pascua, con la esperanza de que su nación estuviera en paz y fuera protegida por la gracia de Dios. Ezequías envió correos a todo el reino de Judá e Israel para transmitir las noticias de que vinieran a celebrar la Pascua en Jerusalén. No obstante, muchos israelitas en el norte, que no habían guardado la Pascua durante unos doscientos cincuenta años desde el tiempo en que Israel fue dividido en dos, se burlaron de los correos y su mensaje. Al final, solo el pueblo del reino de Judá en el sur guardó la Pascua con un pequeño número de israelitas en el norte, quienes fueron a Jerusalén a guardarla.[13] Después de guardar la Pascua, el pueblo destruyó todos los ídolos que había adorado inconscientemente y los altares que fueron usados para sacrificar y adorar otros dioses.[14]
Tres años después, Asiria, una poderosa nación en aquel tiempo, invadió y sitió a Israel en el norte y rodeó a Samaria, la capital de Israel; y finalmente la conquistaron tres años después. Israel en el norte, que no celebró la Pascua, fue completamente destruido alrededor de 721 a. C.[15] La Biblia explica que la causa fundamental de la destrucción de Israel en el norte fue que violaron el pacto de Dios.[16]
En el decimocuarto año de Ezequías, el ejército asirio también invadió Judá en el sur, conquistó muchas ciudades y la cercaron en Jerusalén. Dios prometió la salvación a Judá en el sur, que celebró la Pascua, y envió un ángel para pelear contra los soldados asirios. Como resultado, cerca de ciento ochenta y cinco mil soldados asirios fueron asesinados durante la noche y el ejército asirio se retiró.[17] Conforme a la promesa contenida en la Pascua, Judá en el sur fue protegido de los desastres y escapó de la crisis de la destrucción.
- Periodo del rey Josías
Después de Ezequías, el reino de Judá en el sur dejó de celebrar la Pascua y volvieron a erigir los ídolos que Ezequías había derribado. Josías, el decimosexto rey de Judá en el sur, el bisnieto de Ezequías, llegó a comprender la Pascua en el año 18 de su reinado, al leer el libro de la ley que fue encontrado mientras se reparaba el templo.[18] Josías y el pueblo decidieron celebrar la Pascua y quitaron los ídolos que habían servido inconscientemente en el templo de Dios.[19] Después de la Pascua, destruyeron todos los ídolos en Israel y Judá. Desde los días de los jueces, a lo largo de los días de los reyes de Israel y los reyes de Judá, nunca se había celebrado una Pascua así. Por ello, en la Biblia está escrito que Josías fue un rey que obedeció completamente todas las leyes de Dios con todo su corazón, alma y fuerzas.[20]
La Pascua del Nuevo Testamento
Ceremonia
Al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado, se realiza primero la Ceremonia del Lavado de Pies.[21] Luego, se prosigue con la ceremonia de comer el pan y beber el vino que representan la carne y la sangre de Jesús, quien es la realidad del cordero de la Pascua.[22]
La Pascua del nuevo pacto de Jesucristo
La historia de la emancipación de los israelitas de Egipto, después de guardar la Pascua, fue una profecía de que Jesucristo establecería la Pascua del nuevo pacto y liberaría a la humanidad del mundo pecador. Jesucristo envió a Pedro y a Juan a preparar la Pascua el día catorce del primer mes según el calendario sagrado, cuando era habitual sacrificar el cordero de la Pascua.[23] Esa noche, Jesucristo lavó los pies de sus discípulos en el aposento alto de Marcos[21] y todos juntos celebraron la Pascua. Jesucristo proclamó el nuevo pacto, diciendo que el pan de la Pascua es su carne y que el vino de la Pascua es su sangre, que por muchos fue derramada para remisión de los pecados.[22]
“Cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles. Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca! […] Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.”
Tomando la copa del vino de la Pascua, Jesús dijo que era el nuevo pacto en su sangre y también dijo que había deseado ansiosamente comer la Pascua. Esto significa que el núcleo del nuevo pacto es la Pascua. Al día siguiente de la Pascua, Jesús murió en la cruz como la realidad del cordero de la Pascua. Los soldados romanos rompieron las piernas de los dos ladrones, que estaban colgados en la cruz a cada lado de Jesús, pero a Él no le rompieron los huesos, sino que traspasaron su costado con una lanza. Así se cumplió la profecía de que los huesos del cordero de la Pascua no debían ser quebrados.[24]
La Iglesia primitiva guardó la Pascua del nuevo pacto
Los israelitas celebraron la Pascua por segunda vez en el desierto de Sinaí al año siguiente del Éxodo. Esto se volvió una profecía que mostraba que los apóstoles y los santos de la Iglesia primitiva guardarían la Pascua del nuevo pacto al anochecer del día catorce del primer mes según el calendario sagrado todos los años después de la ascensión de Jesús. El apóstol Pablo enfatizó que debemos guardar la Pascua porque Cristo fue sacrificado como la realidad del cordero de la Pascua.[25] Además, dijo que debemos conmemorar el sacrificio de Jesús cada vez que comamos el pan y bebamos el vino en la noche de la Pascua, la noche que fue entregado, y que la celebremos hasta que Dios venga.
“Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado [la noche de la Pascua], tomó pan; y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí. […] Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí. Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.”
Bendiciones de la Pascua
El reino de los cielos
La historia de los cuarenta años que los israelitas estuvieron en el desierto después de salir de Egipto muestra de antemano lo que sucedería en los tiempos del Nuevo Testamento.[26] La historia de los israelitas guardando la Pascua, siendo liberados de Egipto y entrando en Canaán después de cuarenta años de su viaje en el desierto era una profecía de que los santos de los tiempos del Nuevo Testamento guardarían la Pascua, serían liberados del mundo pecador y entrarían en el reino de los cielos, la Canaán espiritual, después de vivir en el desierto de la fe.[27][28]
No hay registro de los israelitas guardando la Pascua después de guardarla por segunda vez en el desierto de Sinaí hasta justo antes de entrar en Canaán. Del mismo modo, en los tiempos del Nuevo Testamento, la Pascua no fue celebrada por casi mil seiscientos años después del Concilio de Nicea en 325 d. C. El hecho de que los israelitas celebraran la Pascua justo antes de entrar en Canaán era una profecía que mostraba que la Pascua del nuevo pacto, que no había sido guardada durante mucho tiempo, sería restaurada justo antes de que los santos de los tiempos del Nuevo Testamento entraran en el cielo, la Canaán celestial.[29] Así como los israelitas que guardaron la Pascua entraron en Canaán, los santos que guardan la Pascua del nuevo pacto pueden entrar en el reino de los cielos, la Canaán espiritual, en el Nuevo Testamento.
El perdón de pecados
La Biblia enseña que todas las personas mueren por sus pecados.[30] Ya que no pueden evitar la muerte, viven como esclavos del pecado toda su vida.[31] La única manera de ser liberados del pecado es ser vestido con la gracia de la preciosa sangre de Cristo derramada en la cruz.[32] Jesucristo dijo que el vino de la Pascua es su sangre derramada por muchos para el perdón de los pecados. Por ello, debemos guardar la Pascua del nuevo pacto para recibir el perdón de los pecados gracias a la sangre de Cristo. Así como los israelitas que guardaron la Pascua en el Antiguo Testamento fueron liberados de Egipto, en el Nuevo Testamento, los que guardan la Pascua del nuevo pacto son liberados del mundo pecador.[33]
La vida eterna
Cuando nuestros pecados, que son la causa de la muerte, sean quitados, podremos vivir para siempre. Por ello, si recibimos el perdón de los pecados, podemos tener la bendición de la vida eterna. Por esa razón, Jesucristo dijo que recibiremos la vida eterna si comemos su carne y bebemos su sangre guardando la Pascua del nuevo pacto.
“Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.”
Dios nos dio la vida eterna a través de la Pascua del nuevo pacto porque el reino de los cielos que la humanidad anhela es un lugar donde no hay muerte.[34] Nadie puede entrar en el cielo con el cuerpo mortal. Por esa razón, Dios da la bendición de la vida eterna a su pueblo por medio de la Pascua del nuevo pacto.
Los desastres pasan por encima
La Pascua es una señal del poder de Dios que permite que los desastres pasen por encima. La Biblia registra la historia de que el pueblo de Dios, que guardó la Pascua, fue protegido de los desastres. Cuando los israelitas guardaron la Pascua en el tiempo del Éxodo, fueron protegidos de la plaga que mató a todos los primogénitos.[35] Cuando el rey Ezequías y el pueblo de Judá en el sur guardaron la Pascua, fueron protegidos del ataque asirio.[13][17]
En los tiempos del Nuevo Testamento, los que guardan la Pascua del nuevo pacto son protegidos de las plagas postreras. Cuando alguien come la carne de Jesucristo y bebe su sangre a través del pan y el vino de la Pascua, puede permanecer en Dios y llegar a ser su posesión.[36] Y Él ha prometido que protegerá de los desastres a quienes permanezcan en Él como su posesión.[37]
El cumplimiento del primer mandamiento
El primero de los diez mandamientos: “No tendrás dioses ajenos delante de mí”, contiene dos mandamientos: “No servirás a otros dioses” y “servirás solo a Dios”. La Pascua es una verdad especial que nos permite destruir a otros dioses y adorar solo a Dios; porque la Pascua fue establecida como el día de castigo a todos los dioses ajenos desde el tiempo del Éxodo.[35] Si todos los otros dioses son juzgados en la Pascua, esto significa que solo Dios permanece. Si comprendemos la Pascua y la celebramos, podemos adorar solo a Dios, no a otros dioses. Por ejemplo, Dios destruyó a los dioses de Egipto en la noche de la Pascua en el tiempo de Moisés. También en el tiempo de Ezequías y Josías, los israelitas pudieron servir solo a Dios destruyendo los ídolos después de guardar la Pascua. Incluso en los tiempos del Nuevo Testamento, podemos guardar completamente el primer mandamiento si guardamos la Pascua del nuevo pacto.
Véase también
- Nuevo pacto
- Pascua del nuevo pacto
- Los desastres y la Pascua
- El sello de Dios
- Fiesta de los Panes sin Levadura
- Fiesta de las Primicias
- Fiesta de las Semanas
- Fiesta de las Trompetas
- Día de Expiación
- Fiesta de los Tabernáculos
Vídeos relacionados
- Sermón : La Santa Comunión de la Pascua que Dios nos ordenó celebrar
- El propósito de la fe y la Pascua
Referencias
- ↑ «Deuteronomio 16:1-7».
- ↑ «Números 9:11-12».
- ↑ «Éxodo 12:42-47».
- ↑ «Éxodo 12:5-11».
- ↑ «Éxodo 12:29-30».
- ↑ «Éxodo 40:17».
- ↑ «Números 9:1-5».
- ↑ «Números 9:9-13».
- ↑ «Números 14:29-30».
- ↑ «Josué 5:2-5».
- ↑ «Éxodo 12:48».
- ↑ «Josué 5:10-12».
- ↑ 13,0 13,1 «2 Crónicas 30:1-12».
- ↑ «2 Crónicas 31:1».
- ↑ Introduction to 1-2 Kings, ESV
- ↑ «2 Reyes 18:9-12».
- ↑ 17,0 17,1 «2 Reyes 19:30-35».
- ↑ «2 Reyes 22:3-11».
- ↑ «2 Reyes 23:3-4».
- ↑ «2 Reyes 23:21-25».
- ↑ 21,0 21,1 «Juan 13:4-15».
- ↑ 22,0 22,1 «Mateo 26:19-28».
- ↑ «Lucas 22:7-8».
- ↑ «Juan 19:32-36».
- ↑ «1 Corintios 5:7-8».
- ↑ «1 Corintios 10:1-11».
- ↑ «Hebreos 3:15-19».
- ↑ «Hebreos 4:6-11».
- ↑ «Isaías 25:6-9».
- ↑ «Romanos 6:23».
- ↑ «Juan 8:34».
- ↑ «Efesios 1:7».
- ↑ «Romanos 8:1-2».
- ↑ «Apocalipsis 21:1-4».
- ↑ 35,0 35,1 «Éxodo 12:11-13».
- ↑ «Juan 6:56».
- ↑ «Isaías 43:1-2».